Aunque el letrero ya no corresponde al comercio actual, afortunadamente aún sobrevive uno de los antiguos reclamos comerciales más bonitos del botxo.
La Drogueria Barandiarán fue uno de esos comercios centenarios que tuvo que cerrar por la competencia de las grandes cadenas del perfume y la cosmética. Se inauguró a principios de siglo cuando Don Eduardo Barandiaran, tras emigrar a Cuba volvió con fortuna y empezó en el negocio de la droguería, llegando a tener varios locales por Bilbao.
Hace ya unos años que cerró y ahora el local es una cadena de zapaterías bilbaína que ha querido mantener un pedazo de la historia comercial de Bilbao. Por dentro se ha intentado respetar al máximo la estructura original adaptandola al nuevo uso comercial.
Un edificio con encanto, que le da su antigüedad.
ResponderEliminarUn bonito detalle el de sus nuevos propietarios mantenerlo intacto , y adaptado a su nuevo comercio.
Feliz domingo
Emblemático, muy emblemático!
ResponderEliminarSuerte que no lo quitaron. Ojalá siga ahí para siempre
ResponderEliminar¡Bien por esa cadena de zapatos que ha sabido conservar parte de la historia de su ciudad!
ResponderEliminarBesos mil de las dos
J&Y