EL GRAN CASINO DE LA RABASSADA

Seguramente la mayoría de Barcelona ya hayan oído hablar de él, y es que en Barcelona, a principios del siglo XX, el auge de la acomodada burguesía catalana hizo que se construyera en la sierra de Collserola un hotel, restaurante y casino que llegó a tener hasta parque de atracciones.

Se encontraba en la carretera de la Rabassada, la que une Barcelona con Sant Cugat atravesando la sierra de Collserola. Un lugar rodeado de naturaleza pero muy cerca de la ciudad.

En 1899 se inaugura el Gran Hotel Restaurante de la Rabassada, obra del arquitecto francés M. Lechavallier Chevignard y más adelante en 1909 se crea La Rabassada Sociedad Anónima con inversores franceses y compra el hotel restaurante y terrenos colindantes para crear el casino y futuras atracciones. En 1911 el complejo queda ampliado con una lujosa obra del arquitecto Andreu Audet i Puig convirtiendose en el Gran Casino la Rabassada.

La prohibición del juego durante la dictadura de Primo de Rivera empezó con el declive del lugar y con la Guerra Civil el lugar se convirtió en cuartel siendo el fin del lugar y en los años 40 se derribó.

Aunque prácticamente quedó derribado, aun se pueden ver algunas partes, excursión obligada para amantes de la historia de Barcelona, lugares misteriosos y abandonados; así que yo tenía que ir a verlo.

El lugar que se conserva medio entero, es la Font de la Rabassada, que con sus formas redondeadas simula la montaña de Monserrat y pertenecía a los jardines del casino.

Si queréis leer la historia con más detalle y ver más fotos, visitar el trabajo El Gran Casino de la Rabassada de Fotos de Barcelona.